Para el bebé

Luego del nacimiento el bebé necesita de su madre tanto como en el vientre, necesita un periodo de maduración antes de aprender a gatear. Lo llamamos el periodo de gestación exterior este tiene un impacto profundo y muy importante en el desarrollo emocional, neurológico y físico del bebé. Ya que el bebé nace antes de tiempo, necesita las mismas condiciones del vientre para su correcta maduración: Calor, Movimiento, Alimento inmediato, El sonido de mamá. Esto implica que el bebé debe estar en constante proximidad ya sea en brazos de la madre, ó en contacto físico.

Para la madre

A diferencia de otros mamíferos los bebés humanos necesitan mayor cuidado; de la madre depende el adecuado desarrollo de su pequeño. Al nacer el bebé necesita respirar por sí solo, ajustar su sistema gastrointestinal a la nueva función de ingerir, digerir y eliminar, desarrollará su sistema nervioso para descubrir y adaptarse a su entorno. Mientras la madre esté en contacto con su bebé, él podrá mantener en un ritmo más regular todos sus sistemas. La lactancia Materna también beneficia física y emocionalmente a mamá. La lactancia crea oleadas de la hormona del amor, la que ayuda a fortalecer el vinculo.

Posición Ranita

Al nacer los bebés humanos están en estado de flexión (acurrucados), con su columna en forma natural larga en C (convexa) ó en forma de J redondeada. La posición ergonómica del bebé cuando se encuentra relajado es con sus rodillas levantadas, en una cómoda posición similar a una M; esta posición también es llamada, posición “ranita” ó posición fetal.